Ángelus
V/. El ángel del Señor anunció a María.
Acordaos, oh piadosísima Virgen María, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que han acudido a vuestra protección, implorando vuestra asistencia y reclamando vuestro socorro, haya sido abandonado de vos.
Animado con esta confianza, a vos también acudo, oh Madre, Virgen de vírgenes; y, aunque gimiendo bajo el peso de mis pecados, me atrevo a aparecer ante vuestra presencia soberana.
No desechéis, oh Madre de Dios, mis humildes súplicas, antes bien escuchadlas y atendedlas favorablemente. Amén
1°. La Encarnación.
2°. La Visitación de Nuestra Señora a su prima Santa Isabel.
3°. El Nacimiento del Hijo de Dios en Belén.
4°. La Purificación de Nuestra Señora.
5°. El Niño perdido y hallado en el Templo.
Misterios dolorosos Martes y viernes
1°. La oración en el huerto.
2°. La flagelación del Señor.
3°. La coronación de espinas.
4°. La Cruz a cuestas.
5°. Jesús muere en la Cruz.
Misterios gloriosos Miércoles y domingos
1°. La Resurrección del Señor.
2°. La Ascensión del Señor.
3°. La venida del Espíritu Santo.
4°. La Asunción de Nuestra Señora.
5°. La Coronación de María Santísima.
Misterios luminosos Jueves
1º. El Bautismo del Señor.
2º. Las bodas de Caná.
3º. El anuncio del Reino de Dios.
4º. La Transfiguración del Señor.
5º. La institución de la Eucaristía.
Después de cada misterio
María, Madre de Gracia, Madre de misericordia, defiéndenos de nuestros enemigos y ampáranos ahora y en la hora de nuestra muerte. Amén.
Al terminar los cinco misterios
– Dios te salve, María, Hija de Dios Padre, llena eres…
– Dios te salve, María, Madre de Dios Hijo, llena eres…
– Dios te salve, María, Esposa de Dios Espíritu Santo, llena…
V/. Señor, ten piedad.
R/. Señor, ten piedad.
V/. Cristo, ten piedad.
R/. Cristo, ten piedad.
V/. Señor, ten piedad.
R/. Señor, ten piedad.
V/. Cristo, óyenos.
R/. Cristo, óyenos.
V/. Cristo, escúchanos.
R/. Cristo, escúchanos.
V/. Dios, Padre celestial,
R/. ten misericordia de nosotros.
V/. Dios Hijo, Redentor del mundo,
R/. ten misericordia de nosotros.
V/. Dios Espíritu Santo,
R/. ten misericordia de nosotros.
V/. Trinidad Santa, un solo Dios,
R/. ten misericordia de nosotros.
V/. Santa María,
R/. ruega por nosotros.
Santa Madre de Dios,
Santa Virgen de las vírgenes,
Madre de Cristo,
Madre de la Iglesia,
Madre de la Misericordia,
Madre de la divina gracia,
Madre de la Esperanza,
Madre purísima,
Madre castísima,
Madre virginal,
Madre sin corrupción,
Madre inmaculada,
Madre amable,
Madre admirable,
Madre del Buen Consejo,
Madre del Creador,
Madre del Salvador,
Virgen prudentísima,
Virgen digna de veneración,
Virgen digna de alabanza,
Virgen poderosa,
Virgen clemente,
Virgen fiel,
Espejo de justicia,
Trono de sabiduría,
Causa de nuestra alegría,
Vaso espiritual,
Vaso digno de honor,
Vaso insigne de devoción,
Rosa mística,
Torre de David,
Torre de marfil,
Casa de oro,
Arca de la alianza,
Puerta del cielo,
Estrella de la mañana,
Salud de los enfermos,
Refugio de los pecadores,
Consuelo de los migrantes,
Consuelo de los afligidos,
Auxilio de los cristianos,
Reina de los Ángeles,
Reina de los Patriarcas,
Reina de los Profetas,
Reina de los Apóstoles,
Reina de los Mártires,
Reina de los Confesores,
Reina de las Vírgenes,
Reina de todos los Santos,
Reina concebida sin pecado original,
Reina elevada al cielo,
Reina del Santísimo Rosario,
Reina de la familia,
Reina de la paz,
Oh Señora mía
¡Oh Señora mía! ¡Oh Madre mía! Yo me ofrezco enteramente a vos; y en prueba de mi filial afecto, os consagro en este día mis ojos, mis oídos, mi lengua, mi corazón: en una palabra, todo mi ser. Ya que soy todo vuestro, oh Madre de bondad, guardadme y defendedme como cosa y posesión vuestra. Amén.
Bendita sea tu pureza
Bendita sea tu pureza y eternamente lo sea, pues todo un Dios se recrea, en tan graciosa belleza. A ti celestial princesa, Virgen sagrada María, te ofrezco en este día, alma vida y corazón. Mírame con compasión, no me dejes, Madre mía.
Alma Redemptóris Mater Para el Tiempo de Adviento y Navidad
Salve, Madre soberana del Redentor, puerta del cielo siempre abierta, estrella del mar. Socorre al pueblo frágil, que intenta levantarse.
Ave, Regína cælórum Para el Tiempo de Cuaresma